Aprender a ajustar las velas, a cualquier edad
- Bienestar y comunicación
- 1 jul
- 2 Min. de lectura

"Lo peor de la vida no es la muerte, sino no saber vivir", escribe Rosa Montero (2024) con esa sabiduría que nace de quien ha navegado tanto por aguas tranquilas como por tempestades. Sus palabras no son solo una reflexión, sino un llamado bastante seductor, tipo un susurro en el oído del alma, para ver si logramos despertar del letargo de lo automático, y atrevernos, por fin, a girar el timón…o al menos a tomarlo nosotros (que ya sería mucho decir). Y es que la vida, después de todo, no es una línea recta, sino un mar vasto donde cada ola nos invita a corregir la ruta, o a embarrarla…(sniff), y a atreverse como decía [1]Lope de vega, sin importar cuántas vueltas crea uno que le ha dado al sol (ya muchos estamos bien doraditos, y otros no aprendemos nada y repetimos lección).
Ni hablar de los cuarentones, que creemos saber tomar decisiones…y cuando es el momento, vemos que es bien difícil, y peor cuando uno se da cuenta de que toca reorientar el camino o simplemente ajustar las velas de nuestro barquito (así sea chiquitico, como la canción que me generó tanta ansiedad cuando era niña, de saber que no podía navegar)…y eso no es cuestión de calendarios, sino de valor. En todo caso, es igual si tienes veinticinco, cuarenta o sesenta, lo que importa es permitirse unos minutos de honestidad diariamente, revisar la proa y la popa y hacernos preguntas de frente, ¿en qué persona me voy a convertir si sigo en esta línea?
Seguramente también me leen personas que nos les falta nada, pero no nos digamos mentiras, a veces hace falta una buena compañía... y para ellos también va esta publicación, no es bueno que el barquito se quede con un solo capitán, a veces es bueno tener “visitantes”, “polizontes”, “aventuras”, no todo puede ser mar en calma…
Bueno, aquí me quedo, con el primer rayo de sol de la mañana, como mis talleres de toma de consciencia y liderazgo emocional y racional (también hay que pensar). Sigo acompañándolos entre palabras y reflexiones compartidas, te ayudo a reconectar con tu brújula interior, a retar tus emociones y a construir, paso a paso, un viaje de bienestar y de aventura, ¡que sientan Suyo carajo!, como el latido del corazón. Me encuentran en: 👉 bienestarycomunicacion.com.
Recuerden: no viajen solos, o por lo menos, elijan con quien viajan. (ya sé que les debo videos, pero mis hormonas me han hecho dormir más y primero lo primero). Besos a quienes llegaron hasta aquí.
Bertha (In Love)
Referencia APA:Montero, R. (2024, junio 5). “Lo peor de la vida no es la muerte, sino no saber vivir”. Ethic. https://ethic.es/entrevista-rosa-montero-animales-dificiles
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